¿QUIÉN NO LE CREE A
MORELLI WOOLF?
http://vallevirtual.blogspot.com/2012/06/planes-de-agua-se-tramitan-conveniencia.
Por
Leopoldo de Quevedo y Monroy
Locombiano
Sandra
Morelli Rico no es del equipo Santos. Ni del de Colombia ni de Brasil. Fue
elegida Contralora hasta el 2014 por el mismo período que el del Presidente de
la República, por el Congreso en pleno, de una terna presentada por la Corte Constitucional,
la Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado.
El
talante de la Contralora no se podía adivinar por su cara monda y lironda, su
sonrisa recatada y su paso acompasado. Es la primera mujer que pisa callos de
frente, en una Institución que siempre ha sido tildada de clientelista, como un
campo minado. Allí vagaban sin rumbo y sin control los amigos de los amigos. Y
pasaban los años sin que hubiera un remezón. Todo parecía normal. Colombia era
el paraíso sin Eva, sin Adán y sin la serpiente del mal. Desde allí no se veía
ni un solo pecado venial.
Pero
llegó la Morelli, con apellido de Diva. Nada casual. Con mirada de microscopio
y lupa gorda, con la coraza de su hoja de vida, con temple de monje templario y
sin el ruido de los micrófonos. Solo se oye el golpe cuando ya las pruebas
están a la vista de todos y cuando se nombran los implicados. Tiemblan los desaforados
y los despistados consorcios incursos en desfalcos, faltantes, sobrecostos,
contratos sin requisitos, obras pagadas y no efectuadas.
Para
la contralora no hay coronas ni disculpas que valgan. Ella es la defensora de
oficio del erario salido del bolsillo ciudadano. No le importa que contralores
anteriores se hayan hecho los de la vista gorda y que hayan vacacionado su
cargo.
Su
nombre es Contralora. O sea, ir contra la corrupción, contra el desenfreno,
contra la coima o el chanchullo, contra el sobre por debajo. Contra el que sea
o los que sean, así su apellido sea Hurtado o Lindo o Obeso o Lobo o Caro. Cantar
la tabla.
Morelli
apareció como la golondrina en verano en el gallinero y se puso a cantar. Y
pasito a pasito se ha convertido en la reina del avispero. No tiene 10
ministros ni 4 mil jueces ni 450 soldados ni ha creado varias Agencias. Pero ha
tocado la llaga y muchos se están doliendo. Eso es trabajar sin redoblar
palabras. ¿Quién no le cree a Morelli Woolf? La frase no es ¿Y ahora quién le
teme a Morelli Woolf?
Vaya
a saber cómo es la vida. El solemne y acucioso Rudolf Hommes ha salido al ruedo
sin que nadie le hubiera pedido. Él no puede creer lo que Morelli ha prevenido
ahora que va vencerse la concesión a BHP Billinton de explotación de níquel en
Córdoba de Cerro Matoso por más de 30 años. Hasta renunció Beatriz Uribe, la
Presidenta de la Agencia Nacional Minera. Se destapó la olla y quema, pero
Hommes dice que era mejor dejarla tapada. Y la concesión empieza a poner cuñas
en TV como también lo hizo antes Pacific Rubiales para tapar la olla. Oh, las
delicias de la plata para que todos callen.
La
Morelli no está de campaña. Apenas va en mitad de camino. Y lo que queda por descubrir…
Ojalá siguieran su ejemplo, contralores, auditores, personeros, interventores
de obras y en otros dos años se acabaría con tanto hervidero de quienes
defraudan el erario con permisos legales de minas, con aprovechamientos
forestales, con contratos de consorcios temporales y a dedo.
11-08-12 4:21 p.m.
No hay comentarios:
Publicar un comentario