PAPEL DE LAS BIBLIOTECAS HOY
Momento de solaz en el Primer Congreso de Gestión para la Información y la Documentación en la Universidad Icesi de Cali
Por Leopoldo de Quevedo y Monroy*
Colombiano
Ocho universidades de Cali terminan hoy el Primer Congreso Internacional de Gestión para la Información y Documentación dirigido a los profesionales y personal que gerencian las bibliotecas de las Universidades en América. El evento se realiza en el campus que posee la Universidad Icesi en la ciudad de Cali en el sector de Pance.
Más de 150 profesionales acudieron a la cita en el Auditorio Manuelita para escuchar a conferencistas colombianos, mexicanos, españoles y cubanos. Tres ejes temáticos se incluyeron en la agenda: Gestión para el Capital Humano, Gestión para la Innovación e inteligencia tecnológica y Gestión para la Calidad en espacios para Bibliotecas.
Se pensaría que el discurso y las discusiones se centrarían en hablar del papel del libro frente a la herramienta de internet y la cantidad de productos que sirven de plataforma a esa red: el laptop, las tablets, los celulares avanzados. Pero no.
Los conferencistas abordaron sus presentaciones con planteamientos que invitaban a la reflexión sobre la relación entre los documentos e informaciones que se brindan para formar el conocimiento, el perfil y las competencias de quienes atienden a los usuarios en las bibliotecas y los medios y sus calidades de espacios y actividades en las bibliotecas.
El perfil de las bibliotecas, y de quienes allí laboran, hoy en día ha cambiado. La biblioteca no es un espacio para almacenar y guardar la memoria escrita solamente. No es un lugar a donde se va a sentar en silencio el investigador en un cubículo o donde se prestan libros. El bibliotecario no es un ser anónimo que recibe lotes y lotes de libros y espera que los usuarios vengan a preguntar por un título o un tema. Allí no solo se lee y se piensa, se recogen datos y se devuelven libros.
Cuando se piensa en una biblioteca se espera que hasta allí haya llegado la modernidad. Que haya fácil acceso, buena iluminación, horarios flexibles, comodidad en las sillas, que el personal sea amable y preparado para prestar un servicio eficaz y suficiente. El presupuesto debe estar acorde con la necesidad del ser humano para el mundo de hoy.
El bibliotecario, entonces, será un profesional mediador, un educador, investigador, un ser apasionado por la actualidad científica, por la frescura y análisis del pensamiento humano. Deberá estar al tanto de los avances en las diferentes materias y áreas del conocimiento. Será un experto en el manejo de la información y la ubicación acerca del contenido y tendencias del libro que ofrece, de los intereses de los lectores y del valor limitado de un libro con relación a la información que se consigue en la red de internet o en lugares específicos.
El usuario de hoy, aunque tiene la facilidad de su blackberry, tablet o laptop personal, espera una orientación en el uso de estos aparatos en la propia biblioteca. No hay riñas entre el libro y los aparatos electrónicos. El bibliotecario o bibliotecólogo entiende que la modernidad ofrece más facilidades y oportunidades a quien desea encontrar datos, informaciones, autores. Si no se encuentra el libro en sus estantes, el usuario podrá ir de la mano del bibliotecario hasta el ordenador y abrir una ventana en una aplicación y sitio que el bibliotecario le mostrará diligente.
Felicitaciones a la Red Universitaria de Alta Velocidad del Valle del Cauca, a las universidades que la forman y que organizaron este Primer Congreso con estas características, y con invitados tan calificados de dentro y fuera del país. Aquí ofrecemos entrevistas a dos conferencistas y a la directora administrativa del Congreso, Sandra Catalina Roldán.*
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