Mientras 300 habitantes del municipio destruyen las trincheras de
la Policía por todo el pueblo, otro grupo de personas sube a las montañas para
exigirle a las Farc que se desarmen y suspendan el fuego.
Según un informe del diario El País de Cali, desde la 1:00 p.m. de
este lunes, la población civil de Toribío, en el departamento del Cauca,
adelanta un plan de desarme para ponerle un alto al conflicto que, desde
finales de la semana pasada, se desarrolla en el municipio.
Mientras un grupo de 300 personas desarman las trincheras que
rodean la estación de Policía, y botan al río la arena de los sacos que sirven
de barricadas, otra comisión sube a la montaña para dialogar con la guerrilla
de las Farc.
Los habitantes que adelantan la manifestación, advierten que se
quedarán quince días en la parte alta del municipio, donde se encuentran los
subversivos, para exigirles "que salgan de los sitios sagrados de la
comunidad", según explicó el dirigente indígena Edilfredo Rivera.
Agregó que, con esto, se quiere plantear un debate público a los actores
armados que están en la zona, "en el que se les muestre, con datos
estadísticos, lo que está sucediendo, pues las bajas entre ellos son mínimas y
los verdaderos afectados son la población civil".
Los hostigamientos de la guerrilla de las Farc a la Fuerza Pública
de Toribío, que se extendieron durante todo el fin de semana, hicieron que por
lo menos 400 campesinos del municipio tuvieran que desplazarse.
Rivera explicó que la población civil del departamento del Cauca
"se ha cansado y se está pronunciando" y que el ataque de la
guerrilla a un centro médico de Toribío, que dejó cuatro personas heridas,
"fue lo que rebosó la copa, nos cansamos de tanta guerra, de no poder
trabajar, de que nuestros niños no puedan ir al colegio".
Uno de los heridos, añadió, podría perder una de sus extremidades
debido a la gravedad de las lesiones causadas por el lanzamiento de un 'tatuco'
contra el centro asistencial. "Entonces todo esto nos dice que el discurso
con el cual exigimos que se vayan de nuestros territorios lo tenemos que
convertir en acciones y eso es lo que hemos estado haciendo desde ayer",
dijo el dirigente indígena.
Durante la acción adelantada en las calles de Toribío por los
indígenas no hubo discusión con la Fuerza Pública, según indicó Rivera, pues
"ellos respetaron nuestra decisión porque ya conocen la posición de la
comunidad. No nos estamos sectorizando, sino que queremos vivir en paz,
tranquilos. El año pasado, en la reunión del Consejo Regional Indígena y demás
sectores sociales, se dijo lo que teníamos que hacer y hoy lo estamos llevando
a cabo".
El dirigente indígena recordó que los actos realizados este lunes
se hacen también para conmemorar a las víctimas de la chiva bomba que fue
activada por la guerrilla hace un año, en ese mismo municipio.
El 9 de julio del 2011, subversivos del Frente Sexto de las Farc
activaron una 'chiva bomba' al frente de la estación de Policía del municipio,
lo que dejó tres personas muertas, 103 heridas y más de 460 casas destruidas.
En esa ocasión, los habitantes del municipio también exigieron el cese de las
hostilidades en la zona.
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