11 de julio: Día mundial de la población

El pasado 31 de octubre el mundo batió un record: 7 mil millones de personas en la tierra, el doble que en 1971.

Crecimiento y envejecimiento poblacional,

¿oportunidad o reto?

Por: Ángela Sanabria González

De las más de 7 mil millones de personas que tiene el mundo, 46 millones son colombianos. Para el 2050 serán 9 mil millones en el mundo y 70 millones en Colombia, de los cuales 15 millones serán mayores de 60 años. Mientras que el envejecimiento de la población mundial es un triunfo indudable del desarrollo global, trae consigo ciertos retos frente a los cuales los gobiernos tienen que prepararse hoy mismo.

En el año 2012 la población adulta mayor colombiana ascendió al 10.5% de la población total, convirtiéndose en uno de los países que más rápido envejece en América Latina; según la CEPAL, los programas de protección social solamente cubren el 23% de los adultos mayores y más del 40% de los mismos no recibe ingresos propios de ninguna fuente. Además, el Ministerio de Salud y Protección Social calcula que al menos el 10.1% de la población en situación de desplazamiento forzado a causa del conflicto armado interno corresponde a personas de 60 años y más.

Según Naciones Unidas actualmente el 65% de las personas mayores del mundo vive en los países en desarrollo. Para 2050, esta cifra subirá a 79%. Eso significa que Colombia, como país en desarrollo, tendrá muy pronto nuevos desafíos frente al proceso de envejecimiento: cambios económicos, alteración de las estructuras familiares, consecuencias generadas por el conflicto armado interno, legislación, entre otras, por lo que se hace necesario que aspectos como el sistema pensional, salud y seguridad sean adaptados para responder a las necesidades de las personas mayores, que pronto serán la mayoría de los colombianos.

La etapa de transición demográfica del país tiene varias oportunidades que podrían contribuirían a reducir los índices de pobreza y por ende a mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos. Según UNFPA, los países experimentan, una sola vez en la vida, una etapa de transición conocida como bono demográfico y que puede ser aprovechada si se potencian las habilidades y capacidades de la población joven. Una política exitosa en educación y salud, junto con una política económica y social dirigida a la generación de oportunidades para los jóvenes, es indispensable para capitalizar el bono demográfico.

¿Por qué envejece rápidamente la población?

El decrecimiento de la tasa de fecundidad y el aumento en la expectativa de vida son dos factores centrales en el proceso de envejecimiento. A nivel mundial, se estima que la fecundidad actual es de 2.55 hijos por mujer frente a 5 hijos por mujer entre 1950-1955. El promedio de vida en todo el mundo aumentó, en los últimos 20 años, de 48 a 69 años de edad, mientras que la tasa de mortalidad ha venido disminuyendo gradualmente, situación que responde al avance de la medicina y la ciencia, a mejores prácticas de sanidad y al acceso de muchos grupos poblacionales a la medicina convencional. En Colombia el promedio de vida es de 70 años para hombres y 77 para mujeres. Sin embargo, la esperanza de vida en condiciones saludables es de 64 años para los hombres y 69 para las mujeres.

Tabla N° 1. Situación actual de la población en Colombia, América Latina y el Mundo. 

Tabla N° 2. Proyecciones demográficas Colombia, América Latina y el Mundo. 

Según Susannah Taylor, Directora de Programa País de HelpAge International en Colombia, el Día mundial de la población debe ser una razón para estudiar el envejecimiento global como uno de los temas más importantes del siglo actual y predecir sus efectos cuando está combinado con otros como el cambio climático, aspecto altamente reconocido como causante de un número creciente de desastres naturales alrededor del mundo, ante el cual los países en vías de desarrollo no están preparados en recursos ni capacidad para responder de manera adecuada.

Muchos países desarrollados se ocupan de las tasas bajas de fecundidad, la disminución de las poblaciones y la adecuada atención al proceso de envejecimiento, muestra de ello es que 97 de cada 100 personas nacen en países sub-desarrollados, donde el riesgo de muerte y discapacidad por enfermedades no transmisibles es cuatro veces superior que en los desarrollados.

Además, según Susannah Taylor, en un futuro cercano serán muchas más las personas mayores afectadas por crisis humanitarias ya que los países sub-desarrollados son los que más experimentan desastres naturales y están viviendo un envejecimiento acelerado; esta situación empeorará drásticamente las condiciones ya precarias de pobreza y vulnerabilidad de la población.

Envejecimiento, ¿oportunidad o reto?

Las personas mayores tienen un enorme potencial como trabajadores y colaboradores al interior de sus familias y comunidades; pero además son una innegable fuente de experiencia y conocimiento.

El proceso de envejecimiento tiene muchas ventajas, hasta ahora desaprovechadas por el Gobierno y la sociedad. La falta de reconocimiento de estas capacidades se reflejará pronto, más aún en zonas rurales donde las personas mayores solían tener un papel mucho más visible y reconocido. Por ejemplo, en 1960 los pobladores del campo colombiano llegaban al 48% de la población nacional. Según el DANE, en el 2020 solo habitará el 22,9% de la población total y la mayoría de ellos serán personas mayores de 60 años.

Según Roberto Chamucero, Presidente de la Confederación colombiana de Personas Mayores, la política social y políticas públicas existentes generan mucha marginalidad, especialmente hacia las personas mayores. Las medidas que se han tomado hasta el momento no son incluyentes y por ende tienen que enfrentan diariamente exclusión laboral, productiva y social, y en eso la sociedad en general tiene una gran responsabilidad. Igualmente afirma que las personas mayores merecen una Pensión Social Universal que les permita tener una vida digna en la vejez y que reconozca las contribuciones que han hecho durante años en actividades independientes que nos les permitieron contribuir al sistema pensional. Con este tema, solamente podemos hacer un llamado al conjunto de la sociedad civil para que reconozca a las personas mayores como un grupo social, que puede aportar en la construcción de un país más incluyente, participativo y justo.

De continuar excluyendo a este valioso y creciente grupo poblacional estamos condenando a millones - de los que hoy son todavía muy jóvenes – a vivir una vida de marginalidad y pobreza. Los cambios demográficos radicales que se manifestarán en el año 2050, requieren que el Gobierno y la sociedad en general tomen acciones inmediatas hoy, más aún en un país como Colombia afectado desde hace cincuenta años por un conflicto interno armado que ha producido el número más alto de desplazados en el mundo, y donde toda una generación ha envejecido sobreviviendo con el impacto.