Por: Luis Barrera
Editor Proclama del Cauca
"Comprometerse a favor de
una nueva evangelización para redescubrir la alegría de creer y volver a
encontrar el entusiasmo de comunicar la fe", pidió el Arzobispo de Popayán
Monseñor Iván Antonio Marín López a los por lo menos 1500 asistentes que se
dieron cita en la convocatoria del VIII encuentro del SINE-Sistema Integral de
Nueva Evangelización en el polideportivo en Santander de Quilichao, organizado
por la vicaría del Norte.
El máximo Jerarca de la Iglesia
Católica en el Cauca señaló que el santo Padre Benedicto XVI en el año de la fe
“nos invita a los sacerdotes y fieles del Cauca a una auténtica y renovada
conversión al Señor, único Salvador del mundo, al tiempo que nos pide, suscitar
en todo creyente la aspiración a confesar la fe con plenitud y renovada
convicción, con confianza y esperanza".
Monseñor Marín López, en su
homilía eucarística del evento de las parroquias nortecaucanas pidió
“comprender de manera más profunda no sólo los contenidos de la fe sino,
juntamente también con eso, el acto con el que decidimos de entregarnos
totalmente y con plena libertad a Dios".
El Arzobispo de Popayán expresó
igualmente que “el año de la fe deberá expresar un compromiso unánime para
redescubrir y estudiar los contenidos fundamentales de la fe, sintetizados en
el Catecismo de la Iglesia Católica que debemos trasmitir con entusiasmo en
todas las parroquias del territorio caucano”.
“Hago un llamado a nuestros
sacerdotes y laicos comprometidos porque de lo que se trata eses de reavivar e
infundir una nueva linfa a la fe de los creyentes en Cristo y el Catecismo es
el camino seguro para conseguirlo. En él se resume y expresa la fe de toda la
Iglesia desde sus orígenes hasta nuestros días. En él hallamos: la fe que
profesamos a través del credo, la fe que celebramos en la liturgia, la fe que
vivimos moralmente y la fe que rezamos y nos comunica con Dios a través de la
oración”, explicó el Arzobispo de los caucanos.
Visiblemente emocionado por la
organización del encuentro y las presentación socio-dramáticas presentadas por
la pastoral juvenil de las parroquias de Santander de Quilichao, Monseñor Iván
Antonio Marín López sostuvo que “en la sociedad en que vivimos se entrecruzan
los cristianos con hermanos en la fe, que ahora son indiferentes y viven al
margen de ella; con hombres y mujeres de otras religiones, o que no son
creyentes, aunque busquen sinceramente y de corazón la verdad. En este año de
la fe, es importante para todos tomar en las manos el Catecismo de la Iglesia
Católica, leerlo, reflexionarlo, dejar que la verdad y belleza de la fe que en
él se expresa echen raíces en el corazón y florezcan en frutos de luz, de
conversión y renovación, de gozo y de paz. A los no creyentes la lectura del
Catecismo puede constituir una llamada amorosa de Dios.”
Por su parte el sacerdote diocesano
Adán Mina, de la parroquia María Auxiliadora de Guachené, en diálogo con PROCLAMA señaló que “Los creyentes en
este Año de la Fe estamos llamados a que se haga cada vez más fuerte la
relación con Cristo, pues sólo en Él tenemos la certeza para mirar al futuro y
la garantía de un amor auténtico y duradero.”
El párroco del templo de Cristo
Rey, que atiende los barrios del sur en Puerto Tejada, Nelson Darío García
Ballesteros, señaló que “El Año de la Fe es una peregrinación en los desiertos
espirituales del mundo contemporáneo, llevando consigo solamente lo que es
esencial: ni bastón, ni alforjas, ni pan, ni dinero, ni dos túnicas, como dice
el Señor a los apóstoles al enviarlos a la misión”.
Al finalizar su homilía, el
Arzobispo de Popayán Monseñor Iván Antonio Marín López afirmó que “Jesucristo
es el verdadero y perenne protagonista de la evangelización, por ello tenemos
que promocionar por todos los medios un movimiento que con la fuerza del
Espíritu, lleve la buena noticia a los pobres en sentido material y espiritual,
además de comprometernos a defender la vida”.
El prelado de igual manera,
expresó su profundo pesar por la reciente muerte del Padre Manuel Corredor en
la ciudad de Cúcuta de la cual era oriundo y hasta donde tuvo la oportunidad de
viajar para acompañar a sus familiares y consolarlos en estas horas de dolor, a
la vez que les trasmitió las condolencia manifestadas de los feligreses de la
Parroquia del Espíritu Santo en Puerto Tejada, en la que el presbítero
fallecido servía pastoralmente.
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