Por su carácter de gestor de la nueva ley de bomberos (coordinador
ponente del proyecto de ley que beneficia a 25 mil integrantes de dichas
instituciones) y del seguro bomberil (hoy con más de 100 mil miembros
voluntarios del sistema para la prevención y atención de desastres que tienen
garantizada su seguridad por accidentes o muertes), el Sistema Nacional de
Bomberos de Colombia le rindió hoy domingo, 05 de agosto de 2012, un homenaje
al senador Luis Fernando Velasco Chávez, en Santander de Quilichao.
La iniciativa de este reconocimiento fue del capitán Víctor
Antonio Claros Medina, comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de
Santander de Quilichao, quien dio la bienvenida a las delegaciones de 21
cuerpos de bomberos de igual número de municipios caucanos. Igualmente se
hicieron presentes, el presidente de la Confederación Nacional de Bomberos de
Colombia, capitán Francisco Javier Piedrahita Santa; en representación del
gobierno nacional, el coordinador del Sistema Nacional de Bomberos de Colombia,
Capitán Germán Andrés Miranda Montenegro y el presidente honorario de la Confederación
Nacional de Cuerpos de Bomberos de Colombia, capitán Carlos Humberto Rivera.
Como anfitriones, del departamento del Cauca, actuaron los capitanes Alfredo
Guevara, presidente Asociación de Bomberos del Cauca; Alfredo Muñoz, presidente
de la Delegación departamental de Comandantes de Cuerpos de Bomberos; María
Lesbia Oliveros, supervisora departamental de bomberos; Guido Enríquez Ruiz,
presidente del Consejo de Oficiales del Cuerpo Bomberos Voluntarios de Santander
de Quilichao y Gerardo Castrillón, representante de la Gobernación del Cauca.
Guido Enríquez, ante un auditorio de más de 200 personas, fue el
encargado de hacer la apertura protocolaria del acto de reconocimiento al
senador Velasco Chávez. En su intervención rememoró la gestión histórica de la
institución bomberil desde 1887 cuando se fundó el primer cuerpo de bomberos en
el departamento colombiano de Panamá, pasando por la creación del de Bogotá –que
tuvo dos fundaciones, una de voluntarios y otra oficial (Policía), en 1889; el
cuerpo de bomberos de Cali, en 1928, y en el Cauca, donde el primero que se
creó fue en Guapi (1948), luego el de Popayán en 1950 y tercero el de Santander
de Quilichao en 1957, gestión que se propusieron Alfonso Medina, Miguel Hernando
Bonilla, Arístides Delgado, Jorge Diógenes Hurtado, Gerardo Villaquirán, Eduardo
Velasco, José Manuel Holguín, Gerardo Villegas, Julio Marino Orejuela, Libardo Atehortúa,
entre otros.
Cuando habló el coordinador del Sistema Nacional de Bomberos de Colombia,
Germán Andrés Miranda Montenegro, al hacer referencia a la Ley General de
Bomberos, destacó su importancia pues permite aceptar la función pública de
todos los bomberos, su profesionalización, descentralización de la capacidad
operativa, trae condiciones especiales para que la labor este enmarcada dentro gestión
integral del riesgo de incendios, rescates en todas sus modalidades y el
control de materiales peligrosos. Igualmente subrayó que por primera vez Colombia
se pone a la par de los 188 países de mayor desarrollo bomberil en cuanto al
nivel de responsabilidad táctico-operativo que deben tener, pero enfatizó que hay
todavía un largo trecho por andar por la necesidad de la reglamentación de esa
ley.
El Cauca está en
llamas
El senador Luis Fernando Velasco Chávez recibió como
reconocimiento unas estatuillas de bombero e hidrante y en su intervención de
agradecimiento dijo que la ley general es un justo reconocimiento a la abnegada
labor de los bomberos, para dignificar una profesión hasta ahora excluida de
los presupuestos de los municipios, departamentos y hasta del mismo Gobierno
Nacional y al referirse al departamento del Cauca recordó principalmente al
fallecido y siempre recordado comandante Henry Otoniel Holguín David quien le
había inducido a concluir que “si no se erradican las condiciones que han
generado un incendio (forestal), verá cómo se vuelve a prender cuando creíamos
que ya se había apagado, por el ello, un buen bombero no solo es el que
arriesga su vida, sino que, además, sabe prevenir los incendios y un buen político
tiene que ser un buen bombero: estoy en un departamento en llamas, y cuando
vemos algunas acciones del Estado, tenemos que decirle, firme y respetuosamente,
que muchas veces se han dedicado a intentar apagar las llamas que se ven pero
han dejado que el incendio que va por debajo siga quemando a este departamento”.
Velasco Chávez fue contundente: “Un departamento que fue manejado,
y en algunos casos, lo sigue manejando una clase dirigente que no ha entendido
que el Estado es un medio para resolver problemas sino que ven al Estado como
un botín o un fin, es una clase dirigente que no está capacitada para apagar
las llamas del Cauca”
El senador Velasco anunció que por iniciativa suya el gobierno
nacional trabaja sobre un plan de choque para la generación de empleo en el Cauca,
y argumentó al respecto que “pueden montar 300 batallones, uno en cada vereda
del norte Cauca, pero mientras la gente no tenga de qué vivir, podrá apaciguarse
el fuego, pero cuando se vaya el batallón, volverá a surgir el incendio… la
gente necesita de qué vivir en esto consiste el plan de choque, que
afortunadamente lo está asumiendo el gobierno nacional”, dijo que en
concordancia, “el miércoles realizará un debate para hacerle seguimiento a un
plan de desarrollo especial para el sur del país a partir del departamento del
Cauca que he venido pidiendo en los últimos años”.
“… El día que por
fin podamos explicarles a esos imbéciles funcionarios de Incoder que…”
Refiriéndose a las llamas que queman al Cauca dijo: “El día que la
gente en las montañas de Corinto pueda sembrar café y reciban apoyo y no tengan
que meterse a la marihuana, comenzamos a derrotar ese incendio… El día que los
grandes dirigentes de este país entiendan que ayudándole a nuestro campesino
fiquero, obligando a que en las obras públicas se utilice el fique caucano, huilense,
antioqueño, santandereano y nariñense, por encima del geotextil traído de Estados
Unidos, ese día nuestros campesinos e indígenas tendrán qué hacer y no tendrán que
meterse a la coca… El día que por fin podamos explicarle a esos imbéciles
funcionarios de Incoder que no han dejado que se adelante un proyecto para
convertir a la Salvajina en el primer lago de producción de tilapia para el
mercado nacional e internacional, tendríamos 700 empleos en Suárez, y la gente
vería que el Estado no solo son unos señores vestidos de militares que bajan al
lado del lago a dar de baja a Cano, sino también, unos señores vestidos de
civil que llegan al lago a sembrar tilapia para que la gente tenga de que vivir…
El día que los políticos entiendan lo que hay en un cuerpo de bomberos de Colombia,
ese día, el país comenzará a cambiar”.
“… necesitamos
inteligencias que sean antorchas para iluminar y no teas para incendiar…”
Para finalizar, el senador Velasco Chávez anunció que “Lo que
necesita el país son más bomberos y menos pirómanos; pirómano que en medio de
un conflicto social a cambio de ir a generar consensos, va y se echa un
discurso para ver si prende incendios, porque hay gente a la que le gusta los incendios porque vive de
los conflictos; y lo que necesita este país es gente que piense distinto, gente
que cuando tenga posibilidades de liderazgo ayude a evitar el incendio y no a
prender la llama; necesitamos inteligencias que sean antorchas para iluminar y
no teas para incendiar, eso es lo que necesita Colombia.
Fotografías: David Luna
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